Creyente, desde el informe Brandt en los años sesenta, en la cooperación Sur – Sur, ví prodigiosa la idea de crear una red de portales educativos para la región. Hubo que empezar por crearlos en varios países, y aquellos que ya los tenían, ayudaron a los demás en su desarrollo. Una fórmula cooperativa, que de paso aseguró cierta homogeneidad, manteniendo la autonomía de cada país, exigiendo responsabilidad y recursos en proporción.
En un período no muy largo, la Red Latinoamericana de Portales Educativos exhibe hoy 22 portales participantes. Sin abrogarse un papel centralizador, hoy está llamada a convertirse en el albergue de las inquietudes de los educadores de América.
Despliegue de potencial. La red está al servicio de comunidades de maestros, que fácilmente pueden alcanzar más de dos millones, con poder de conectarse. Rápidamente creó un repositorio de documentos homologados, de valor histórico, como la primera biblioteca digital educativa, y puede convertirse en escenario para los diálogos y debates entre educadores sobre sus preocupaciones. También, en casa de experimentación, y en el albergue de las producciones que emanan desde la base, no solo de productos educativos “autorizados”, o de informes oficiales.
Encuentro de Prioridades. La tecnología propulsa cambio radical en la escena de la educación. Preocupa a los gobiernos por igual, como acertar en políticas y acciones. Después de más de 20 años de esfuerzos, la región exhibe una “colcha de retazos” en sus intentos de incorporación. Situación que empeora diariamente cuando nuevos dispositivos móviles llegan directamente a manos de los alumnos, cambiando “de facto” la dinámica escolar tradicional. Políticas de inversión e incentivos, modelos de adopción – como el caso 1 a 1- la política de multimedios, las comunidades magisteriales y los proyectos estudiantiles transfronterizos, son el inicio de agendas de prioridad que merecen atención coordinada.
Casa de la Meta-formación. El maestro, ante el reto de tecnologías que vendrán, enfrenta la revisión de sus propios procesos de aprendizaje. Cómo estar al día?, ver prácticas exitosas, errores comunes, consejos secretos del éxito. Los cursos, las becas, los materiales, todo alojado en la red, para crear uso diario. Si voy a educar con tecnología, en la red debo encontrar la tecnología para educarme.
Prueba de tendencias. Acaban de llegar las tablets, como anticipo de las que vendrán, para las que aún no tenemos nombre. Pero ya es visible una tendencia a la conectividad, por lo tanto, la red puede ofrecer espacios de experimentación, para anticipar como prepararse para estos retos. De hecho lo que debiera estar pasando es que las nueva tecnología debería llegar primero al sistema educativo, a los maestros, en vez de recibir desechos viejos de empresas.
Proyectos Regionales. Con “comunidades Conectadas” vía red, será orgánico el crecimiento hacia iniciativas y proyectos colaborativos entre maestros y alumnos de la región. La fórmula de “Aulas Hermanas” es buen inicio y puede evolucionar hacia proyectos regionales de colaboración en temas como agua, medio ambiente, y prioridades regionales, siguiendo visiones tipo “generación de los bicentenarios”, o de los proyectos que los países inscriben bajo la estrategia de Bienes Públicos Regionales, como el caso de seguridad social y solidaridad entre los niños.
Ambientes Personales. Así como uno puede entrar al portal de una aerolínea y éste te reconoce y trae tus datos, registros históricos, ofertas personalizadas y atiende tus necesidades, la aspiración es que cada maestro tenga su “oficina virtual docente”. Le anuncia lo nuevo en su área de interés, a publicar inquietudes, en múltiples formatos, desde video, documento o libro, hasta mensaje corto para red social. Una red regional de oficinas docentes personales.
Comunidad de Curadores de Conocimiento. Se perfila al curador como experto seleccionador y difusor de bienes de conocimiento asociados a toda actividad. Prefiero llamarlos animadores, y en la red cada país designa los suyos, que en conjunto configuran una comunidad de promotores sobre la riqueza yaciente en la red. En comunidad, ven áreas prioritarias, y promueven la búsqueda, preparación y distribución en el sistema educativo. Una función clave es la de guía. Atender consultas, promover debates y recorrer los caminos que servirán al docente.
Vocería Regional. Es obvio que tiene más sentido una negociación concertada multilateral, que la individual de cada país. Tiene más sentido, cuando se trata de recursos educativos. Ciertos tipos de adquisiciones, licencias o distribuciones, pueden ser manejadas extra-regionalmente con representación única vía la red.
Confederación Latinoamericana. Evoca la Copa Libertadores de América. Portales y comunidades de cada país, originan desarrollos innovadores en materia de colaboración intra-regional. Concursos inter-escolares, proyectos colectivos, intercambio de docentes (física o virtualmente), así como abrir los recursos de gobiernos e instituciones. Las nuevas políticas tipo open government, y planes como el de MIT, que puso en internet los materiales de todas las asignaturas y carreras. Claro, esos tesoros pedirán curador. Idea: confederación de escuelas formadoras de docentes, apoyada por la red.
Certificación Regional. Con la misma idea de la ICT Driver´s License que manejó la Unión Europea, toda la región podría asumir un proceso colectivo para la formación y certificación de sus docentes, en habilidades digitales. Se puede aprovechar la reciente emisión del UNESCO ICT Competency Framework for Teachers, asociada con el estándar global de la International Society for Technology in Education, para crear una base homóloga de logro común.
Itinerarios de aprendizaje. Una vía para aprovechar estrategias de navegación sobre objetos de conocimiento, se puede establecer, entre todos los portales nacionales, cuando sus integrantes califican estrategias de aprendizaje propuestas por expertos o por usuarios, aconsejando las más exitosas. Las calificaciones son visibles en los portales y estimulan su uso y descarga.
Todos autores. Hace poco una firma de Polonia que representa expertos de Finlandia me presentó una aplicación de e-publishing que permite a los niños generar y publicar sus propios libros digitales formalmente. Imagino la red en pocos años llena de esta producción “Bottom – Up”. La filosofía es simple: todos debemos ser aprendices permanentes y autores frecuentes.
En fin, ¿Qué tenemos que hacer?. Lo que haya que hacer para que la grandeza de estos destinos se logre. No podemos ser inferiores a la magnitud del reto.
Germán Escorcia
Consultor internacional sobre Innovación Gubernamental y sobre aprendizaje. Preside la Academia Internacional sobre Tecnología y Conocimiento. Ha sido Director del Centro Latinoamericano de Investigación en Educación, y asesor de OEA, UNESCO, BID, PNUD y UNICEF. Apoya el proyecto de fomento a industrias culturales digitales y gestión de talento. Colombiano residente en México Ingeniero de sistemas especializado en ciencia Política, cibernética y telemática, en Francia, Estados Unidos y Canadá.