Por Juan Carlos Toscano Grimaldi.
“Si he logrado ver más lejos, ha sido porque he subido a hombros de gigantes”,
Isaac Newton
Esta cita de Newton en una carta a Robert Hook en 1676 es, desde mi punto de vista, un ejemplo de lo que está significando Twitter en el mundo de la educación.
Newton quería manifestar su homenaje a todos aquellos que habían investigado antes en el campo de la óptica y significaba el mérito de todos ellos con sus pequeños o grandes pasos en los avances del conocimiento en ese campo.
En el mundo científico esta frase ha sido citada por todo tipo de autores destacando Stephen Hawking que tiene un libro titulado: A hombros de gigantes: las grandes obras de la física y la astronomía en el que cuenta la historia de esas ciencias sobre la base del pensamiento de Copérnico, Galileo, Kepler, el propio Newton y Einstein.
¿Y qué tiene que ver twitter con todo lo anterior? Creo que bastante. En la época de Newton la producción de escritos y sus mecanismos de difusión no tienen comparación con lo que ahora representa Internet. Dado que Newton con esos mecanismos pudo avanzar a hombros de gigantes, un ciudadano con acceso tiene muchos gigantes sobre los que subirse.
Cuando un docente se acerca a Twitter poco a poco accede a un mundo de conocimientos y experiencias de “gigantes” que las comparten en su TL. A algunas seguro que ya había llegado por otras vías pero son muchas más las que son nuevas e interesantes.
Una de las profesiones que más han avanzado en las últimas décadas es la medicina. Y una de las razones de ese avance se debe a la celebración de Congresos sobre sus distintas especialidades. Esos Congresos han ido permitiendo a los profesionales de la medicina conocer nuevas técnicas, nuevas terapias incluso “nuevas enfermedades”. Además logran crear una red de colegas de profesión con los que pueden compartir su desarrollo profesional. Nadie discute que la profesión médica tiene un prestigio que le permite ir dando las pautas de sus procedimientos.
Aunque es verdad que existen congresos de educación, también lo es que sólo una pequeña proporción de los docentes tiene posibilidad de acceder a ellos. Aunque las nuevas tecnologías empiezan a permitir ver en directo muchos de ellos y ver sus resultados en diversas páginas web de muchos más nos falta esa segunda parte que tienen los congresos y que es la posibilidad de participar con preguntas y, mucho más importante, de intercambiar puntos de vista con los demás asistentes.
Para ello todos debemos tener Twitter. Para ver lo que opinan los demás sobre una conferencia que se está celebrando, para dar nuestras opiniones y también para ir logrando consensos sobre determinados temas.
Pero estas relaciones tienen, desde mi punto de vista, una mayor fuerza que la que da la presencia física en Congresos. Lo más habitual es que a un Congreso accedan profesionales con cierto grado de similitud de condiciones. En Twitter es muy diferente. Se puede seguir a especialistas de muchos países y regiones, de diversas especialidades que nos permiten acercarnos a contextos muy diferentes y eso, sin duda, es mucho más valioso en la educación donde cada uno de los alumnos es diferente de otro y una atención personalizada es un factor clave para lograr la mejor calidad posible.
Otra ventaja respecto a los congresos de los médicos es que en Twitter la palabra no solo la tienen los consagrados, la tienen todos, incluso los alumnos y sus familias, y en la educación la condición de gigante es algo que está muy repartido. Gigantes son los profesores nuevos llenos de ilusiones y de dudas, de ganas de aprender y de innovar. También lo son los más veteranos, a los que quizás las nuevas tecnologías les han llegado un poco tarde pero que tienen mucho que aportar.
Quisiera aprovechar esta oportunidad para hacer un llamamiento a los profesores a que se adentren a este mundo. Un primer paso podría ser iniciarse como usuarios pasivos de Twitter y empiecen a seguir a algunas cuentas que tienen mucho que aportar y que les van a conducir a otras, quizás menos conocidas, pero no por ello menos interesantes (@zonarelpe y @EspacioOEI les va a conectar con muchas cuentas de interés).
Pasada esta fase de mero receptor, y que cuanto menos dure mejor, hay que dar el paso a ser un usuario activo. Para ello se puede desde compartir lo que se va viendo destacable con los demás o dar un paso más decidido y empezar a tener un blog en el que se vea reflejando tanto prácticas docentes como pensamientos sobre la educación. Obviamente eso hay que ir reflejandolo en Twitter para que los demás lo vayan conociendo. Seguro que todo docente tiene algo de Gigante para otro docente
De esa manera se irá fortaleciendo una profesión, la docente, que como se ha repetido muchas veces, es depositaria de lo más valioso para cualquier persona: sus hijos. Y que con la misma confianza que cuando acude al médico espera que se encuentre solución a una enfermedad, lleva a sus hijos a las escuelas esperando que salgan de ella preparado para un mundo que es muy cambiante y que les haya enseñado a aprender a aprender para enfrentarse al mundo como ciudadanos capaces de encontrar su espacio en el mundo laboral.
Hay muchos profesores que ya están en Twitter, algunos menos que también tienen su blog, pero debemos convencer a los demás para que conforme se acerquen a Internet no dejen de usar esta herramienta.
No quiero terminar sin dejar de recordar que Twitter también es una herramienta para uso en el aula con nuestros alumnos y que seguramente nos va a permitir avanzar en la adquisición de nuevos conocimientos y destrezas con nuestros alumnos y que es un elemento de conexión con la sociedad. Desde la OEI se ha venido promoviendo un programa muy ambicioso: Metas Educativas 2021: La educación que queremos para la generación de los bicentenarios. Su primera meta es la siguiente: Reforzar y ampliar la participación de la sociedad en la acción educadora. Twitter es participación abierta y no creo que haya mejor mecanismo para lograr esta meta que pensar y debatir sobre la educación en una plaza pública global
Finalizo con un especial reconocimiento a aquellos profesionales que iniciaron esta senda del mundo Twitter para la educación. Seguro que en sus primeros pasos estaban algo solos. Ahora seguro que ven con satisfacción que cada vez hay más educadores en este mundo que les siguen, como es de justicia, ellos han sido los primeros de esta generación de gigantes de la educación que con generosidad y profesionalidad comparten sus trabajos y reflexiones.
Juan Carlos Toscano Grimaldi. Coordinador de Ciencia y tecnología y Secretario Técnico del Centro de Altos Estudios Universitarios de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI). Ecuatoriano, residente en España, tiene entre sus responsabilidades la web y la presencia en las redes sociales de la OEI.